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'Anatomía de una caída': autopsia de un matrimonio 'Anatomía de una caída': autopsia de un matrimonio

'Anatomía de una caída': autopsia de un matrimonio

Llega a Filmin y Movistar Plus+ el último gran éxito del cine europeo. Anatomía de una caída se ha hecho con numerosos galardones en los principales festivales y ceremonias de premios. Palma de oro en Cannes, dos Globos de Oro, numerosos galardones en los César y el Óscar al mejor guion original coronan el film dirigido por la francesa Justine Triet como uno de los más importantes de 2023.

Una película construida con una precisión asombrosa. Inteligente, de apariencia austera y nada condescendiente con el espectador. Un drama judicial que se aparta de los senderos del thriller convencional para nadar en las turbulentas aguas de las relaciones de pareja: los celos, las infidelidades, los reproches y la traición son algunos de los temas que aborda Triet en su historia.

Sandra y Samuel viven junto a su hijo Daniel, de 11 años, en una apartada casa en los Alpes franceses. El matrimonio no pasa por su mejor momento, las tensiones entre los dos cónyuges son evidentes desde la primera escena. Ella es una novelista de éxito, él un aspirante a escritor que envidia el talento literario de su mujer. La repentina aparición del cadáver de Samuel tirado en mitad de la nieve despierta sospechas en torno a la misteriosa causa de su muerte. Accidente o asesinato, las investigaciones no son concluyentes y todos los focos se centran en la más que probable culpabilidad de Sandra. A partir de aquí, la historia se reconstruye a través de los testimonios y declaraciones de la protagonista durante el juicio.

Las claves del film llegan al espectador a través de flashbacks que sacan a la luz la problemática relación de la pareja. La insatisfacción sexual, los apuros económicos, la frustración laboral o la discapacidad visual del hijo (de la que se culpa el padre) son dardos venenosos que ambos se lanzan sin piedad en una de las escenas cumbre de la película. Una terrible discusión que demuestra el talento de Justine Triet tras las cámaras y su buen oído para los diálogos. No obstante, aunque se trate de un thriller psicológico, a la directora francesa le interesa menos encontrar la verdad o llegar a la resolución del crimen que enfrentar al espectador a la autopsia descarnada de un matrimonio con problemas. Algo así como un relato típicamente bergmaniano proyectado bajo la (voluminosa) sombra del maestro del suspense Alfred Hitchcock.

Anatomía de una caída está protagonizada por Sandra Hüller, la actriz europea del momento. Su personaje es una mujer fuerte marcada por la tragedia —el accidente de Daniel—, que no esconde su sexualidad y transmite una seguridad y frialdad que siembran la duda respecto a la muerte de su marido. El vínculo que se crea entre madre e hijo es uno de los pilares fundamentales del relato y la respuesta a casi todas las preguntas que la película plantea. No obstante, su grande finale dejará a más de un espectador noqueado durante semanas, sumido en la duda y atrapado entre las redes de un relato ambiguo pero fascinante.

¡Silencio en la sala!

El film de Triet me ha dejado con ganas de recuperar los grandes títulos del cine de togas y tribunales. Por supuesto, el clásico de Preminger, Anatomía de un asesinato —guiño más que evidente en el título—, pero también Testigo de cargo, Impulso criminal, Doce hombres sin piedad (la de Sidney Lumet, así como el magnífico Estudio 1 de TVE) y Veredicto final, entre otras.

Con la venia, señoría: tal vez el triunfo unánime de crítica y público del que ha gozado Anatomía de una caída no sea más que un entusiasmo pasajero. Cabe una duda razonable. Dejemos que sea el tiempo, juez implacable y severo, el que acabe dictando sentencia.